¡Las primerizas también paren en casa... y de nalgas!

BREECH BIRTH POR PARTERA YARILÍS GARCÍA- www.instagram.com/partoencasapuertorico

Al inicio de un embarazo, a menudo tenemos un conocimiento limitado o solo el necesario para enfrentarlo. Con el tiempo, pueden ocurrir cambios que alteren nuestros planes. En muchos casos, esto no es ni bueno ni malo, simplemente es diferente. En mi experiencia como fotógrafa profesional de partos, he presenciado una variedad de situaciones y he llegado a la conclusión de que cada parto es sorprendente. No importa cuántos partos capture, todos son únicos, incluso si son de la misma persona.

Mi primer parto breech fue en el 2021 y fue el parto de mi amiga y partera Diana Soler. Diana tiene un historial de partos muy interesante y entre ellos está el nacimiento de Violeta Beatriz, su cuarta hija y tercer parto en casa. Y mi segundo parto de nalgas fue un parto gemelar en el hogar, también con Yarilís, fueron bebé #6 y #7. Las variaciones en los partos son ahora una parte común de mi trabajo como fotógrafa y videógrafa documental. Es algo que observo, respeto y de lo que siempre obtengo aprendizaje. Mientras más partos y más años, más variaciones.

Con el tiempo, he observado que cada vez más primerizas optan por tomar el control de sus procesos: embarazo, parto, posparto, lactancia y crianza. Esto es un privilegio que hace más de una década no era tan accesible para muchas personas, debido a las limitaciones tecnológicas y de los proveedores. Como indica el título, las primerizas también pueden dar a luz en casa y de nalgas. Sin embargo, esto no depende únicamente de una decisión; también se necesita un plan, apoyo, educación, seguimiento, entre otros factores, incluyendo una posición viable del bebé.

El respaldo de tu acompañante en una decisión tan crucial es esencial, ya que siempre lo necesitarás, especialmente cuando tu mente trate de persuadirte de que no puedes o no debes hacerlo. Por eso, siempre destaco la importancia del copiloto durante el parto. Cuando conocí a Angélica y a Christopher, fue en la sesión de embarazo. Como he mencionado antes, utilizo ese espacio para conectar con las familias, aclarar dudas y establecer límites sobre el servicio. Es uno de mis momentos preferidos del servicio porque me permite conocer la emoción y la perspectiva de cada uno. ¡Y así fue con ellos!

En el seguimiento semanal de las 38 semanas, Angélica me informa que Íker venía de nalgas y que seguiría con el plan de dar a luz en casa. Le respondí: "Tranquila, estamos listos para lo que sea, cuando sea". Como profesional, mi trabajo antes del parto es repasar estos procesos mediante vídeos y lecturas para conocerlos mejor. Esto también me da confianza al presenciar un expulsivo diferente. Durante todo el proceso, ella recibió apoyo físico y emocional de su compañero. Juntos recordaron el gran amor que se tienen y lo ansiosos que estaban por conocer a su bebé.

La preparación para un proceso tan intenso también depende en gran medida de tu equipo de parto. Quienes conocen a Yarilís García saben lo detallista que es al preparar a las familias para este o cualquier otro escenario. Contar con personas que te acompañan, te educan y te proporcionan toda la información necesaria para tomar decisiones informadas es crucial. Así, independientemente del resultado, las familias pueden sentirse satisfechas de haber tomado decisiones desde su autonomía y no desde el miedo. Y menciono a las familias porque, en muchas ocasiones, se recurre a los acompañantes para tomar decisiones distintas a las que la mamá quizás desee.

Es fundamental que el #birthteam esté en sintonía respecto a todos los detalles sobre la familia, y una de las características de #partoencasapr es la integración, mentoría y preparación de sus futuras colegas. Esto genera una atmósfera de respeto y confianza con toda la familia. Colaborar con estas personas es algo natural, ya que cada una sabe qué hacer y dónde posicionarse, permitiéndome tener un espacio seguro para documentar sin interrumpir sus responsabilidades.

En este parto, ese equilibrio fue crucial para lograr todos los objetivos deseados.

En resumen, Angélica logró tener el parto que siempre soñó, en la comodidad de su hogar y junto a su compañero. Fue un parto lleno de salud, amor y sincronía a las 41 + 4 semanas (el promedio para primerizas es de 41.3 semanas, y el parto comenzó temprano ese día). La primera fase fue larga e intensa; en mi opinión, la fase latente es la que más te hace repasar tus planes una y otra vez, siendo una etapa muy mental y confusa. El parto fue típico de una primeriza, con su cuerpo funcionando perfectamente en cada detalle para adaptarse a los cambios de cada fase, sin olvidar que aún quedaba la recuperación posparto y que no podía agotarse completamente durante el parto. ¡Y así paso, a un ritmo lento pero constante y seguro!

Al confiar y entender el proceso, nos damos cuenta de que el ritmo no importa siempre que estemos saludables como díada. Cada parto de nalgas que he documentado ha sido único, pero el resultado siempre ha sido el mismo: procesos y bebés saludables. La mayor similitud es que las tres familias confiaron, se informaron y trabajaron por su parto. No obstante, hay otro factor crucial que permitió que estos nacimientos fueran posibles: la posición de los bebés. Este es un aspecto que se puede discutir con un especialista en el tema.

Hay momentos en la vida que merecen ser recordados con total presencia, pero que, en el instante mismo en que ocurren, nos envuelven con tanta intensidad que se vuelven borrosos con el paso del tiempo. El nacimiento de un hijo es uno de esos momentos. Como fotógrafa de parto, mi trabajo no es solo capturar imágenes, sino preservar una historia que es tan poderosa como íntima. Es un acompañamiento silencioso y respetuoso en uno de los días más transformadores de tu vida. Mi presencia no interrumpe ni dirige; simplemente observa, documenta y honra. Me enfoco en los detalles que muchas veces pasan desapercibidos. Cada nacimiento es único, y mi lente busca capturar esa autenticidad. Porque estas imágenes no son solo recuerdos: son testigos del amor, del poder y de la vida que nace.

Disclaimer: Todo lo discutido anteriormente está basado en opiniones personales de Photocabinet y su fotógrafa. Este contenido no representa el pensar, sentir ni las posturas de ninguna de las personas mencionadas. Tampoco constituye una exhortación o consejo para tomar decisiones particulares. Cada lector es responsable de sus propias interpretaciones y decisiones. Ninguna de las partes involucradas se hace responsable por el uso o interpretación de la información aquí compartida.

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Crédito al equipo de parto:

Partera primaria: Yarilís García

Asistentes: Rosa Logroño, Jayliz M. Ramos y Partera Mumu

Fotografía por: ©Photocabinet | www.instagram.com/photocabinet.pr

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